Diamanta es una empresa social que desarrolla un proyecto llamado “La Escuelita”, un espacio educativo creado para apoyar a los hijos de las madres tejedoras que trabajan en sus talleres. La iniciativa busca ofrecer acompañamiento escolar y promover el aprendizaje en un ambiente seguro.
Paulina Vega, representante de Diamanta, explicó que la empresa agrupa a más de 300 mujeres dedicadas al tejido artesanal. Muchas de ellas asisten al taller con sus hijos, lo que motivó la creación de un lugar donde los niños pudieran aprovechar el tiempo mientras sus madres trabajan.
“Cuando empezó el proyecto, las mamás venían con sus hijos y no había dónde dejarlos. Así nació la idea de crear un espacio para ellos”, comentó Vega.
Actualmente, «La Escuelita» atiende a cerca de 48 niños de nivel inicial y primaria. Durante las tardes, los menores realizan sus tareas escolares, reciben refuerzo académico y participan en actividades que fortalecen sus habilidades emocionales y su conciencia ambiental.
La fundadora del proyecto, Elizabeth Alarcón, recordó que la iniciativa comenzó de manera voluntaria hace catorce años.
“Veía muchos niños jugando mientras las mamás trabajaban, y decidí reunirlos para enseñarles. Poco a poco, más madres se interesaron y así nació La Escuelita”, relató.
Además del apoyo escolar, los niños realizan actividades recreativas como pintura y trabajos manuales. También cuentan con momentos de descanso y juego.
Según Alarcón, el proyecto brinda tranquilidad a las madres tejedoras, quienes pueden concentrarse en su labor sabiendo que sus hijos están en un entorno cuidado y educativo.
“Las mamás se sienten felices cuando ven que sus hijos aprenden y hacen sus tareas. Es una satisfacción compartida”, afirmó.
Síguenos también en nuestras redes sociales:
Búscanos en Facebook, Twitter, Instagram y además en YouTube. Únete también a nuestro canal informativo de WhatsApp haciendo clic AQUÍ.
